La piscina de Vizcaya está al lado norte de la casa. Al entrar y nadar, los invitados se encontraban en una gruta fantasiosa y frágil. El techo de yeso muestra escenas acuáticas creadas por al artista Robert Winthrop Chanler. La Gruta de la Piscina está expuesta al aire salado, altos niveles de humedad relativa y las marejadas que producen los huracanes. Estas condiciones comprometen el metal, el concreto, la caliza, las conchas, el yeso y la pintura que se usaron para crear la gruta.